4 ventajas de usar una termofusora

En el mundo de la plomería y la ingeniería de tuberías, la elección del tipo adecuado de tubería y el método de instalación son cruciales para garantizar la eficiencia, durabilidad y rentabilidad del sistema.

En el pasado, se daba prioridad a estas ventajas aún cuando el uso de cierto material significara más trabajo para el instalador. Y no sólo se hacía más difícil, sino que se alargaba el tiempo de instalación. Esto cambió gracias a una tecnología que ha ganado popularidad en los últimos años: la tubería de termofusión Rotoplas, que se instala utilizando una termofusora y nada más. Vamos a conocer las 4 ventajas de usar una termofusora. Estamos seguros que luego de conocer el proceso tan simple y limpio, querrás usar siempre este método en todos tus trabajos.

Primero: ¿Qué es la Tubería Fusión Rotoplas?

La tubería de fusión, también conocida como tubería hidráulica de polipropileno copolímero random (PPR), se fabrica a partir de polímeros termoplásticos. Estos materiales tienen la propiedad de fundirse cuando se calientan y solidificarse al enfriarse, permitiendo una unión sin costuras mediante el proceso de fusión. Esto garantiza uniones a nivel molecular, por lo que son completamente indestructibles.

La fusión de las uniones se realiza utilizando una herramienta especializada llamada termofusora, que calienta los extremos de las tuberías y accesorios hasta que se funden y luego se presionan juntos para formar una unión molecular y homogénea.

Ventajas de usar una termofusora

– Interior sin adherencias

Las adherencias y protuberancias internas en una tubería crean turbulencias en el flujo del agua. Este flujo turbulento aumenta la fricción interna, lo que se traduce en una mayor pérdida de presión a lo largo de la tubería. En sistemas de distribución de agua, mantener una presión en el agua adecuada es esencial para asegurar que el agua llegue de manera eficiente a todos los puntos de consumo. Las tuberías lisas y sin obstáculos internos permiten un flujo más laminar, reduciendo la pérdida de presión y mejorando la eficiencia del sistema.

Las adherencias internas pueden atrapar partículas en suspensión, lo que conduce a la acumulación de sedimentos dentro de la tubería. Con el tiempo, esta acumulación puede obstruir el flujo del agua, reducir la capacidad de la tubería y aumentar el riesgo de bloqueos. Además, los sedimentos pueden servir como hábitat para bacterias y otros microorganismos, comprometiendo la calidad del agua.

Esto queda en el olvido con la tubería Fusión Rotoplas, porque gracias al uso de la termofusora se crean uniones monolíticas, lisas en su interior. Además el interior de la tubería está protegida con una capa antibacteriana, que no permite la proliferación de las bacterias. Es lisa, libre de porosidades y no permite la incrustación del sarro.

Te interesa leer: ¿Sabías que la tubería del agua puede tener bacterias?

– Cero fugas

El punto más sensible de cualquier instalación de tuberías siempre son las uniones. No importa el material, tarde o temprano habrá una fuga o rotura y siempre será en una unión. De allí la importancia de hacer cualquier empalme, reparación o ajuste con tanto cuidado. Pero esto ha quedado en el pasado gracias a las termofusoras.

Una de las mayores ventajas de la tubería de fusión es la capacidad de crear uniones que no dejarán fugas. La fusión por termofusión produce una conexión monolítica entre las tuberías y los accesorios, eliminando los puntos de unión mecánicos que son propensos a fugas. Esto no solo mejora la integridad del sistema, sino que también reduce la necesidad de reparaciones y el riesgo de contaminación en sistemas de agua potable y otros fluidos sensibles.

– Alta resistencia al impacto

El material termoplástico utilizado en las tuberías de fusión proporciona una flexibilidad superior en comparación con materiales como el PVC o el metal. Esta flexibilidad permite que las tuberías soporten movimientos del suelo, cambios térmicos y cargas de impacto sin fracturarse. En aplicaciones subterráneas, esta característica es particularmente valiosa, ya que reduce el riesgo de daños causados por la expansión y contracción del suelo. Si la comparamos con las tuberías de PVC, estas son menos resistentes a impactos y pueden fracturarse bajo estrés físico o movimientos del suelo.

– Instalación rápida y segura

¿Recuerdas las tuberías de metal? Ponerlas era todo un arte, pues la instalación de tuberías metálicas requería soldadura. Luego fueron sustituidas por sistemas de roscado, pero igual es más laborioso y requiere habilidades especializadas. Eso sin mencionar que pesaban muchísimo, lo que complicaba y encarecía el traslado e instalación.

El uso de una termofusora para instalar tuberías de fusión simplifica y acelera el proceso de instalación. A diferencia de la soldadura de metal o la adhesión de PVC, la termofusión es un proceso relativamente rápido y no requiere materiales adicionales como soldaduras o adhesivos. Esto no solo reduce el tiempo de instalación, sino que también minimiza el riesgo de errores humanos que pueden comprometer la integridad de las uniones.

– Es más práctica y limpia

La termofusora es una herramienta relativamente limpia, que calienta los extremos de las tuberías para fusionarlas. Este equipo genera menos residuos en comparación con los métodos tradicionales, que pueden involucrar soldaduras, residuos de adhesivos, y otros desechos industriales. Ya no tendrás que limpiar residuos de pegamento del área de trabajo e instalación y tampoco tendrás que sacrificar tu ropa de trabajo, que terminaba llena de pegostes y mugre.

Para profesionales en el campo de la plomería, la ingeniería y la construcción, la adopción de esta tecnología puede mejorar significativamente la calidad y eficiencia de sus proyectos. Ya no hace falta conformarse con buenos materiales e instalaciones engorrosas, porque con las tuberías de fusión Rotoplas tienes lo mejor de ambos mundos: tuberías hechas para durar, resistentes y eficientes además de una instalación limpia, sencilla y cómoda.