Uso de Biodigestor para tener agua limpia y saneamiento

El biodigestor es un sistema de tratamiento de aguas servidas, independiente y sustentable, que se ha convertido en la opción más eficiente, económica y ecológica para el tratamiento de aguas de deshecho. Pero, ¿sabías también que el biodigestor Rotoplas es una herramienta clave para solucionar la crisis del agua limpia y saneamiento ambiental?

El problema del agua limpia y el saneamiento ambiental

El saneamiento ambiental hace referencia a la tecnología que permite eliminar o procesar de forma adecuada e higiénica los desechos humanos. En algunas ciudades esto ocurre en el sistema de alcantarillado y acueductos municipales, que reciben las aguas negras y las procesan antes de devolverlas a la naturaleza; sin embargo, en muchos otros lugares no hay un sistema de alcantarillado y se utilizan sistemas locales.

desperdicio de agua

Se considera que casi 3 billones de personas en el mundo dependen de tecnologías de saneamiento locales, como pozos negros o fosas sépticas, pero la inmensa mayoría sencillamente no dispone de los medios para acceder a estos sistemas básicos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que 4.200 millones de personas no cuentan con servicios de saneamiento gestionados de manera segura.

Estos desechos sin procesar se arrojan directamente a la naturaleza. A veces al terreno, otras directo a cuerpos de agua cercanos. Este manejo inadecuado de aguas servidas se traduce en contaminación ambiental, que provoca enfermedades y puede incluso, ocasionar la muerte.

La OMS contabiliza que al menos 1,6 millones de personas mueren todos los años por afecciones causadas por la falta de agua potable y saneamiento básico. La mayoría de estas muertes son de niños menores de 5 años. Asimismo, hay enfermedades como parásitos intestinales, cólera, hepatitis y otras de origen vírico siguen atacando las poblaciones más vulnerables.

Es imposible pensar en solucionar la grave crisis del agua que afecta al mundo entero sin atacar al mismo tiempo el problema del saneamiento ambiental. Los esfuerzos para mantener la integridad de los cuerpos de agua y mejorar el acceso a todas las personas serán en vano a menos que se implementen sistemas para procesar aguas servidas que sean sustentables, económicos y eficientes.

¿Por qué el biodigestor puede ser la respuesta?

Un Biodigestor Rotoplas es un sistema para el tratamiento primario de aguas negras y grises, mediante un proceso de retención y degradación séptica anaeróbica de la materia orgánica. En el interior del Biodigestor Rotoplas cierto tipo de bacterias naturales se reproducen y se encargan de descomponer y degradar los desechos orgánicos. Esto permite que las aguas servidas sean tratadas rápidamente sin usar ningún tipo de químico y sin intervención humana. Es de muy fácil instalación y gracias a su tiempo de vida, resulta una opción muy económica a largo plazo.

biodifestor Rotoplas

Los biodigestores tienen una gran cantidad de beneficios si se comparan con otros sistemas de tratamiento. En primer lugar, son sistemas de procesamiento de aguas servidas que funcionan de manera independiente. No hace falta vaciarlo ni hacerle un mantenimiento periódico como ocurre con las fosas sépticas, tampoco consume ningún tipo de energía para funcionar ni requiere estar conectado a un sistema de alcantarillado. Es completamente autónomo, pero lo mejor es que hace un tratamiento completo de las aguas servidas, por lo que devuelve las aguas residuales al medio ambiente sin contaminar el manto freático y los lodos que pueden resultar del proceso son un excelente abono para las plantas.

Si se analizan las principales características del biodigestor Rotoplas (independiente, autosustentable, ecológico y eficiente), es sencillo notar que es la mejor opción para el tratamiento de aguas residuales en aquellas comunidades en las que no hay forma efectiva de comunicar con un sistema de acueductos, mucho menos su construcción.

Otras opciones como los pozos negros o fosas sépticas requieren una inversión mayor de tiempo, materiales y mano de obra especializada para una correcta construcción, además que no siempre pueden tratar correctamente las aguas negras antes de devolverlas al ambiente. En cambio, el biodigestor no sólo es capaz de eliminar los contaminantes de las aguas servidas, sino que su instalación es rápida y sencilla. Está hecho de una sola pieza, es ligero, resistente y puede ser instalado en pocas horas.

Un Biodigestor Rotoplas puede atender las necesidades de tratamiento de las aguas residuales de familias enteras, dependiendo de la capacidad del sistema adquirido. Los biodigestores pueden ser instalados en red, en caso de que se requiera atender las necesidades de poblaciones mayores; por lo que resulta una inversión inteligente y amable con el medio ambiente.

El cambio es posible. Tenemos el poder de crear un mundo diferente para nosotros y para las generaciones futuras, sólo necesitamos entender que podemos dar el primer paso. Algo tan sencillo como instalar un biodigestor puede tener un impacto positivo en tu comunidad y en el medio ambiente en muy corto plazo. ¡Imagina todo lo que podríamos lograr si cada quien se ocupa de hacer su parte!

¿Cómo aprovechar el Biodigestor Rotoplas en casa?

Un Biodigestor Rotoplas es una solución simple y sencilla para quienes no tienen acceso a las redes de aguas servidas de la ciudad o para complementar estos servicios. Son múltiples las ventajas que este sistema de tratamiento de aguas residuales, por lo que te presentaremos algunas formas de aprovechar su uso en casa. Independiente, eficiente y ecológico, un biodigestor puede mejorar tu estilo de vida y garantizar la salud de tu familia y del medio ambiente.

filtro de agua casero vs un filtro purificador de marca

Aprovechando el Biodigestor Rotoplas

Instalar un Biodigestor Rotoplas en casa te permitirá disfrutar de inmediato de una serie de beneficios que mejorarán tu calidad de vida en corto, mediano y largo plazo. No sólo por sus características y óptimo funcionamiento, sino porque elimina los inconvenientes de otros sistemas de procesamiento de aguas residuales. Para aprovechar todas estas ventajas sólo necesitas ponerte en contacto con nuestros representantes y escoger el modelo que se adapte a tus necesidades.

A corto plazo:

Es una solución discreta y estética

Mientras vives con total normalidad, tu biodigestor está trabajando por tu salud. Los biodigestores Rotoplas se encargan de una tarea poco glamorosa pero muy necesaria. En su interior se hace el tratamiento de las aguas residuales de forma natural, a través de un proceso en el que las bacterias anaeróbicas se encargan de degradar los desechos, creando biogas y lodos inertes que luego podrán usarse como abono para las plantas. Todo esto se hace bajo tierra y sin dejar escapar ningún tipo de olor. La mejor parte es que no requiere mantenimientos especializados periódicos y no estarás en riesgo de que se rebase, colapse o deje escapar malos olores ni gases peligrosos.

Es rápido y económico

Existen otros sistemas de tratamiento de aguas negras, como los pozos negros y fosas sépticas, pero el tiempo de construcción e implementación es muy largo. Como si fuera poco, requieren la compra de una serie de materiales, además de la intervención de un equipo de trabajadores que tengan el conocimiento necesario para construirlo. Esto hace que el costo de estos sistemas se dispare, además que no siempre son eficientes.

Los Biodigestores Rotoplas son sistemas de una sola pieza que se compran y se instalan en muy poco tiempo. Pueden ser instalados por dos personas en pocas horas y puede usarse casi de inmediato. No requiere conocimientos especializados para su implementación y su costo es mucho menor que el de una fosa séptica.

A mediano plazo:

Evita costos de mantenimiento

Los sistemas antiguos de tratamiento de aguas requieren la contratación periódica de personal especializado con equipo pesado para hacer la limpieza y mantenimiento. Si este mantenimiento se retrasa, se corre el peligro de sufrir de desbordamientos, malos olores y contaminación ambiental, además si no se hace de manera correcta, resulta peligroso. Este mantenimiento, que debe hacerse una o dos veces al año, tiene un costo considerable.

El Biodigestor Rotoplas es autolimpiable, por lo que no requiere mantenimiento frecuente. Una vez al año debes abrir la llave para dejar salir los lodos inertes del fondo y listo. Esto puede hacerlo cualquier persona. Más fácil, imposible.

Biodigestor Rotoplas

Evita enfermedades y complicaciones de salud:

El tratamiento adecuado de aguas residuales permite eliminar los elementos patógenos y contaminantes del agua antes de devolverla al medio ambiente. Esto también erradica bacterias y parásitos que podrían ir a parar a fuentes de agua, contaminándolas y exponiendo a los habitantes de la zona (incluyendo tu familia) a sufrir de peligrosas enfermedades gastrointestinales, virus y parásitos que pueden causar la muerte en niños, ancianos y personas inmunodeprimidas.

A largo plazo:

Protege el medio ambiente

Los sistemas de tratamiento de aguas más obsoletos tienden a filtrarse y debilitar sus paredes con el paso de los años y el movimiento de la tierra. Esto quiere decir que los residuos y aguas negras entran en contacto directo con la tierra y fuentes de agua, contaminándola, alterando la flora y fauna. Esto no sólo acaba con la diversidad biológica, imprescindible para el equilibrio ambiental.

Los Biodigestores Rotoplas evitan que virus, bacterias, parásitos y otros elementos nocivos ingresen en los sistemas de agua superficial y subterránea. Esto no sólo mantiene la salud de todos los miembros de la comunidad que pueden usar estas fuentes de agua para el consumo directo o para regar alimentos sembrados, sino que protege el equilibrio natural del medio ambiente.

Larga vida útil

Al estar elaborados con materiales de alta calidad y tecnología de punta, los biodigestores Rotoplas tienen una vida útil de unas cuatro décadas antes de requerir reemplazo y esto también dependerá de su uso, por lo que este periodo de vida podría extenderse un poco más. Es una inversión sólida para mantener unas condiciones sanitarias adecuadas para proteger la salud de tu familia y garantizar el equilibrio biológico medioambiental, todo mientras ahorras dinero y tiempo. No hay excusas para quedarse en el pasado: un biodigestor Rotoplas es justo lo que necesitas.

Biodigestor Casero vs Biodigestor Autolimpiable ¿Cuál es el mejor?

Eficientes y ecológicos, los biodigestores son ideales para zonas rurales donde es difícil acceder a la red de alcantarillado.

El biodigestor es un sistema mecanizado que descompone los desechos en un tanque digestor convirtiéndolos en gases y lodos, que luego se descarga en la superficie deseada.

Entre muchas ventajas el biodigestor se compone de un sistema totalmente libre de mantenimiento y no requiere ningún sistema de alcantarillado. Su funcionamiento es sencillo.

Biogiestor Rotoplas

¿Cuáles son las ventajas de los biodigestores?

  • Digieren sólidos orgánicos de una manera ecológica.
  • Evitan que los desechos humanos y el agua no tratada contaminen las aguas subterráneas.
  • Ofrecen una alternativa al vertido de desechos en ríos, lagos y campos en áreas rurales y semirurales donde no hay sistemas de alcantarillado.
  • El efluente (es decir, el agua) se puede usar para regar las plantas.
  • El efluente es más limpio, más efectivo y más fácil de usar que un tanque séptico porque no necesita limpiarse ni vaciarse.
  • El efluente es inodoro, no desagradable, e incoloro, en comparación con los productos finales de los inodoros que se utilizan actualmente.
  • No requieren el trabajo y la energía involucrados en la reubicación de inodoros de compostaje cada año.
  • Es incoloro, inodoro y sin partículas sólidas.
  • No requiere tratamiento adicional / gestión de residuos.
  • Se puede usar para riego.

¿Biodigestor casero o autolimpiable?

Actualmente hay diferentes métodos y sistemas que se emplean en el tratamiento de residuos domiciliarios. Sin embargo, si no son del todo eficientes, pueden causar graves problemas de contaminación y salud.

Además algunos métodos pueden emanar intensos olores penetrantes. Por eso, es importante que la solución a instalar no presente riesgos a la salud y al ambiente.

A la hora de escoger un tipo de biodigestor es importante que cuente con un sistema eficiente y los tanques de almacenamiento se encuentren en buen estado. Pero qué es mejor, ¿un biodigestor casero o un biodigestor autolimpiable?

Los biodigestores caseros son buenas opciones para tratar las aguas residuales. Sin embargo, pueden presentar fisuras o goteos que impiden un buen funcionamiento.

Además su mantenimiento debe realizarse periódicamente y es, probable, que para el desazolve se emplee mano de obra especializada.

El biodigestor autolimpiable de Rotoplas, en cambio, no se rompe. Su tanque ha sido diseñado con polipotileno de alta resistencia. No presenta fisuras, ni goteos.

Además no lleva mantenimiento. El desazolve se realiza rápidamente abriendo la llave del tanque. Otro beneficio es que es sustentable y no contamina el ambiente.

Biodigestor Rotoplas: novedoso sistema para zonas rurales

Moderno y práctico, el Biodigestor Autolimpiable Rotoplas utiliza un filtro anaerobio interno que aumenta la eficiencia de tratamiento del agua, no requiere de electricidad para su funcionamiento ni ningún producto químico para tratar el agua.

Fabricado con hdpe 100 % virgen de una sola pieza (polietileno de alta densidad) ofrece múltiples ventajas.

Destinado al tratamiento de aguas residuales, el Biodigestor Rotoplas es limpio en todo su uso, no emite olores y minimiza de forma importante la contaminación generada por aguas residuales.

Está diseñado para ser de fácil instalación y mantenimiento, pues se realiza una vez al año.

Cómo se realiza el tratamiento del agua residual en 3 pasos

  1. Primera Etapa.

El agua residual ingresa hasta el fondo donde el diseño del Biodigestor facilita la separación de lodos y agua.

  1. Segunda Etapa.

Las bacterias comienzan la descomposición y el agua pasa a través de esta cama de lodos.

  1. Tercera Etapa.

El agua atraviesa el filtro anaerobio para retener otra parte de la contaminación. Finalmente el agua tratada proveniente del Biodigestor Rotoplas se direcciona hacia una zanja de infiltración o un pozo de absorción. Los lodos se decantan en el fondo del Biodigestor para posteriormente ser purgados durante su mantenimiento.

Mantenimiento del Biodigestor Rotoplas

El Biodigestor Autolimpiable de Rotoplas realiza su desollé en cuestión de minutos. Primer se debe abrir la válvula de extracción para que el lodo acumulado y digerido fluya al Registro de Lodos. Una vez hecha la purga, se debe cerrar la válvula y mantenerla así hasta el siguiente mantenimiento.

Luego se agrega cal a los lodos y se deja reposar para su retiro posterior.

Beneficios del Biodigestor Rotoplas

Seguro y eficiente. Su desempeño es superior al de una fosa séptica debido a que utiliza un proceso anaerobio para realizar un tratamiento primario del agua. Puede ser instalado en viviendas que no cuentan con servicio de drenaje con el fin de recibir las aguas residuales domésticas (negras y grises).

Fácil mantenimiento. El Biodigestor Rotoplas es autolimpiable y de fácil mantenimiento, al solo abrir una válvula se extraen los lodos residuales (no es necesario equipo especializado o maquinaria de limpieza).

Sin costo de mantenimiento, el usuario puede realizar la purga de lodos sin necesidad de utilizar equipo especializado. No requiere equipo electromecánico como bomba o camión de desazolve para su mantenimiento, eliminando costos adicionales para el usuario.

Hermético. Construido de una sola pieza en polietileno de alta densidad, evitando fugas, olores y agrietamientos. Es ligero y fuerte, ofreciendo una alta resistencia a impactos y corrosión.

Es mucho más limpio, higiénico, previene la existencia de focos de infección. Además, es amigable con el ambiente, sustentable, previene la contaminación del suelo y agua.

Biodigestor, ¿cuáles son sus beneficios?

La tecnología del biodigestor ha llegado a revolucionar todas las creencias que se tenían acerca de la necesidad de tratar de forma adecuada los deshechos orgánicos humanos, pues nos ofrecen una alternativa que proporciona una relación costo-beneficio muy rentable, además de ser amable con el medio ambiente. Pero su cualidades positivas no se limitan sólo a su eficiencia, sino que tienen un alcance mayor. Atrás quedaron las épocas en la que la única opción para el tratamiento de aguas residuales en espacios rurales o alejados de las redes cloacales eran los pozos negros o fosas sépticas. Sigue leyendo para aprender más sobre las ventajas de los biodigestores.

Conoce los beneficios de los biodigestores

No consume recursos energéticos

El biodigestor es un sistema autónomo e independiente. Esto quiere decir que no requiere agua, electricidad ni ningún otro recurso una vez instalado. Funcionará de forma eficiente y automática, no tienes que encenderlo ni agregar ninguna sustancia. Su autonomía es una gran ventaja para lugares rurales o que están alejados de los sistemas eléctricos o de agua de los centros poblados; también funcionará de maravilla en lugares donde el suministro de agua sea problemático.

Conoce cómo el Biodigestor Rotoplas apoya a zonas rurales_ PERU

Evita la contaminación del agua

El gran problema con pozos negros y pozos sépticos es que son poco eficientes y son muy costosos. Tarde o temprano por antigüedad o porque no tienen la estructura y materiales adecuados, terminan filtrando los desechos biológicos hacia la tierra y capas freáticas. Por otra parte, hay quienes no tienen los recursos para construirlos, así que desvían los desechos directamente a cuerpos de agua. Todo esto se traduce en ríos, lagos y pozos subterráneos contaminados con virus y bacterias; que causan malos olores y hasta epidemias.

El Biodigestor es la solución a todos estos problemas, pues es hermético y no permite que se escapen los desechos hacia el exterior, ya que está construido con una pieza única de polietileno de alta densidad, que garantiza su resistencia y durabilidad. Dentro del biodigestor ocurre todo el proceso de degradación de las aguas negras y los materiales resultantes no representan ningún riesgo para el medio ambiente ni la salud.

Es económico y fácil de instalar

Construir un sistema de procesamiento de aguas negras antiguo, como los pozos sépticos, requiere una inversión elevada de capital. No sólo hay que adquirir diversos materiales, sino que se requiere maquinaria y mano de obra especializada. Como si fuera poco, dependiendo de su tamaño, su construcción puede tomar bastante tiempo.

Los biodigestores resultan mucho más prácticos y económicos. No sólo el sistema como tal tiene un excelente precio, sino que es de fácil instalación. Para instalar el biodigestor no hace falta invertir en materiales extra o en mano de obra especializada. El trabajo puede hacerse por dos personas y no requiere maquinaria pesada. Además, si estás construyendo en un lugar rural y retirado, sabrás lo mucho que aumentan los costos el transporte de materiales. Con el biodigestor no tendrás este gasto, pues es ligero y fácil de mover.

No requiere mantenimiento

El costo de un objeto no sólo está representado por el precio que has pagado en el momento de adquirirlo, sino que se le deben sumar los gastos que se tendrán en el futuro en cuanto a cuidados y refacciones para que siga funcionando. Los sistemas antiguos como los pozos sépticos requieren un mantenimiento anual, que ha de hacerse con maquinaria especializada como bombas o camiones de desazolve para evitar problemas de rebalse y malos olores. Esto es costoso y no siempre es posible, por lo que el funcionamiento de estos sistemas es deficiente.

Un biodigestor no requiere mantenimiento especializado, pues cuenta con un diseño que lo hace autolimpiable. Una vez al año debes abrir la válvula de lodos, para permitir que salgan los desechos que se han acumulado en el fondo. Este simple proceso puede ser hecho por cualquier persona, no hace falta llamar a un especialista. Estos lodos son seguros, libres de contaminantes y ricos en potasio y nitrógeno, por lo que podrás usarlos como abono orgánico para plantas.

Expandible

Los sistemas de procesamiento de aguas residuales tienen el gran problema de ser fijos. Es decir, se construyen para procesar cierta cantidad de desechos, y si esta cantidad aumenta por causa de una expansión demográfica, suelen colapsar. Por ejemplo, si se instala un sistema para servir a una comunidad de 100 personas, y se construyen más viviendas y se duplica el número, el sistema de procesamiento dejará de trabajar de forma eficiente, causando problemas de malos olores, contaminación, epidemias y más.

Con los biodigestores siempre tienes la posibilidad de expandir. Puedes adquirir un biodigestor de gran capacidad o sencillamente utilizar una red de biodigestores instalados en paralelo. Esto no sólo sirve para lugares turísticos o residenciales, que puedan experimentar un crecimiento exponencial de personas, sino que puede usarse como un sistema de apoyo para redes obsoletas que hayan colapsado.

Los biodigestores son la respuesta moderna, económica y sustentable que elimina una gran cantidad de problemas que están relacionados a la intervención humana de los espacios. Vale la pena invertir en ellos, pues conviene a tu presupuesto y al medio ambiente.

Conoce cómo el Biodigestor Rotoplas apoya a zonas rurales

Para principios de esta década se estimaba que al menos el 30% de la población del Perú vivía en zonas rurales. Este gran sector se caracteriza por la pobreza, que dificulta el acceso a bienes y servicios básicos, sobre todo en el área de salud y saneamiento. El acceso al agua pura es uno de los problemas más recurrentes, pero también la gestión y tratamiento de las aguas negras. Frente a esta situación, que empeora las condiciones de vida de los peruanos más vulnerables y que afecta el ecosistema, la incorporación del Biodigestor Rotoplas Perú se ha convertido en una alternativa real y económica.

El problema de las zonas rurales

Según el informe del Instituto Nacional de Estadística e Informática INEI, se estima que aproximadamente el 30% de los habitantes del Perú en zonas rurales no tienen acceso al agua potable proveniente de la red de servicio público. De estas personas, el 17% obtienen agua de un río, acequia o manantial mientras que el 5% la obtienen de pozos.

Las cifras extraídas de ese informe relativas al saneamiento básico, que es la forma segura e higiénica de procesar las aguas residuales provenientes de los hogares, son alarmantes. La cobertura del alcantarillado público y el acceso a los sistemas de saneamiento público en el sector rural es de apenas del 17%. Esto quiere decir que aproximadamente el 80% de las personas que viven en las áreas rurales eliminan las excretas a través de métodos independientes, que no siempre son los más ideales.

El 23,5% de la población rural utiliza pozos sépticos, el 26% tienen pozo negros, el 7,3% tienen letrinas, mientras que el 25,4% no tienen ningún tipo de sistema de tratamiento de aguas negras. La ausencia de métodos de tratamientos de residuos orgánicos tiene consecuencias directas e inmediatas en la salud de las personas que residen en el área. A largo plazo esto tiene consecuencias negativas en el medio ambiente.

La consecuencias del tratamiento inadecuado de los desechos orgánicos

En zonas rurales, al no estar disponible la red pública de alcantarillado, se utilizan métodos de tratamientos de residuos independientes que suelen ser poco eficientes. Los pozos negros, por ejemplo, no ofrecen ningún tratamiento real contra los microorganismos presentes en las aguas negras. Los pozos sépticos pueden ser útiles, pero su efectividad depende de la construcción, materiales empleados y ubicación; además requieren mantenimiento especializado para poder funcionar.

Cuando se usan letrinas o de plano no hay ningún método de manejo de excretas y aguas residuales, estas se incorporan directamente a las fuentes de agua (ríos, acequias y manantiales), además de contaminar también cultivos de alimentos. Esto se traduce en enfermedades, epidemias y trae consecuencias funestas, se agrava el problema de la muerte infantil, causada por enfermedades gastrointestinales producto del consumo de agua contaminada.

El problema es que elevado costo de construcción y mantenimiento de pozos sépticos adecuados es prohibitivo para la mayoría de los habitantes de las zonas rurales, por lo que se ven obligado a prescindir de estos o a descuidarlos si es que ya los tienen, convirtiéndose de forma involuntaria en un eslabón más del ciclo terrible de contaminación-enfermedad que afecta de forma tan negativa su calidad de vida.

Uso del Biodigestor Rotoplas Perú en zonas rurales

Dentro del panorama gris de la situación del agua y saneamiento en el Perú rural, la tecnología revolucionaria del Biodigestor Rotoplas se ha convertido en el método de saneamiento de aguas negras más económico, fácil de instalar y mantener; hasta el punto en que podría ser una solución real y efectiva para la problemática de la contaminación y saneamiento.

Los biodigestores se han utilizado para tratar el problema del saneamiento en áreas densamente pobladas. El éxito de éstos radica en que su diseño y funcionamiento responde a las necesidades particulares de estos espacios poblados alejados de las redes de alcantarillado público:

– Instalación rápida y fácil. No requiere personal especializado ni maquinaria especial. Se excava el terreno, se ubica y se crea el campo de infiltración. Eso es todo.

– Es duradero y resistente. Es capaz de sobrevivir a las duras condiciones medioambientales del medio rural. El polietileno de alta densidad garantiza una vida útil de casi 4 décadas.

– Es económico, pues no requiere materiales extras para instalarlo. Es mucho más barato que construir un pozo séptico o similar.

Autolimpiable. No requiere mantenimiento especializado, cualquier persona puede hacerlo

Es independiente. Funciona por si solo, no requiere estar conectado a la electricidad, no consume ningún recurso ni debe estar conectado a una red.

Ecológico. No requiere el uso de químicos o sustancias nocivas para el ambiente. Asimismo, hace un tratamiento efectivo sin generar desechos contaminantes. De hecho, los lodos extraídos en el mantenimiento anual pueden usarse como abono.

La instalación de biodigestores Rotoplas en zonas rurales son una forma de contribuir con el saneamiento ambiental, proteger la salud de las comunidades y garantizar el equilibrio medioambiental.

Principales diferencias entre una fosa séptica y un biodigestor

Cuando hablamos de sistemas de saneamiento generalmente pensamos en un inodoro, pero no sólo se reduce a eso, un sistema de saneamiento es una infraestructura enorme que generalmente vemos en las zonas urbanas, pero lamentablemente no todos pueden acceder a esto.

Para la Organización de las Naciones Unidas, el acceso al agua y a un saneamiento digno es un derecho humano fundamental, sin embargo, actualmente aún cerca de 1800 millones de personas utilizan agua de fuentes contaminadas, muchas veces con restos fecales.[1] 2600 millones más, carecen de acceso a servicios de saneamiento básicos, como retretes o letrinas y aunque desde 1990 cerca de 1700 millones de personas han conseguido acceso al agua potable libre de impurezas, aún falta mucho por hacer, pues aproximadamente 884 millones en todo el mundo aún no tienen acceso a este líquido.

Soluciones de saneamiento

Soluciones de saneamiento a través de la historia

Hace miles de años ya se usaba un método de saneamiento que, aunque no era nada salubre, si fue útil, para su tiempo.

Hablamos del pozo negro o pozo ciego, que tiene sus orígenes en Babilonia, aproximadamente hace 4000 a.C. y este era básicamente un hoyo en la tierra donde se almacenaban los desechos humanos, como podríamos esperar, el olor era insoportable y gracias a la filtración, los pozos negros contaminaban los mantos acuíferos subterráneos.

Los romanos mejoraron sus sistemas de saneamiento y dividieron las aguas negras del agua potable mediante alcantarillas en las calles, también se decretó que todos los hogares debían conectarse a las alcantarillas, todo esto cerca del año 100 d.C. además fueron los primeros en reutilizar el agua, pues la que usaban para los baños y termas públicos, era utilizada después para baldear las letrinas.

La edad media es considerada como la peor época en términos de saneamiento urbano, pues además de regresar al uso del pozo negro, también se acostumbraba arrojar la suciedad a la calle, propiciando que la población de animales ponzoñosos creciera, entre ellas las ratas que ahora se sabe, fueron la principal causa de la peste negra, que acabó con cerca de la mitad de la población de toda Europa.

No fue sino hasta el Siglo XVII que John Harrington creó el inodoro, que gracias a que adaptó un depósito de agua en la letrina, permitía llevar los desechos directamente del hogar a las alcantarillas y pozos negros.

Aproximadamente en el año 1860, en Francia, John Mouros realiza el primer diseño de una fosa séptica.

Este consistía en una cámara de concreto que cerrara herméticamente, dentro hay otras dos cámaras, en la primera de ellas se reciben todos los desechos y se va llenando, los residuos sólidos más grandes se asentarán y el agua que quede en la superficie pasará a la segunda cámara, los residuos se descompondrán de manera natural, mediante las mismas bacterias que contienen. Una vez terminado el proceso el agua gris sobrante generalmente es usada para labores de riego, sin embargo, es necesario que personal capacitado vacíe la fosa séptica, ya que es común que se concentren olores fuertes y que podrían ser dañinos para la salud humana, tales como Sulfuro de hidrógeno, metano, amoniaco, monóxido de carbono y dióxido de azufre.

 

Biodigestor, la solución más moderna

Es increíble que después de tantos años, aún se utilicen las fosas sépticas, pues si no se construyen de manera correcta, son un peligro ya que pueden contaminar el suelo y filtrarse hasta los mantos de agua subterránea, por esta razón Rotoplas ha desarrollado el Biodigestor Autolimpiable.

El Biodigestor Autolimpiable de Rotoplas es un equipo para el tratamiento de aguas negras y grises, que cuenta con su propio sistema de autolimpieza que purga el lodo sin necesidad de usar equipos especiales, también utiliza un filtro anaerobio interno que aumenta la eficiencia del tratamiento del agua, el uso de este Biodigestor es tan sencillo como abrir una llave que hará que los lodos se trasladen al pozo o registro, estos lodos deberán dejarse secar con un poco de cal por dos meses, una vez que pase este tiempo, este lodo puede utilizarse como un abono 100% natural, además el agua puede usarse para labores de riego.

Esta es una de las principales ventajas de un Biodigestor frente a una fosa séptica normal, que los lodos tienen una utilidad amigable con el medio ambiente y tienen un uso real, además el realizar todo el proceso de vaciado es muchísimo más sencillo que con una fosa séptica, pues no se necesita de herramientas especiales, esto lo hace mas seguro también. La integridad estructural también es una clara ventaja que tiene el biodigestor, pues está elaborado en polietileno de alta densidad de una sola pieza, lo que garantiza que no tendrá fugas y puede ser instalado sin problemas bajo tierra, cuenta con una garantía de hasta 5 años.

Su capacidad también es una fortaleza, pues a pesar de su tamaño reducido, puede dar servicio hasta a 233 personas con su presentación de 7000 litros, con una fosa séptica común tendríamos que realizar una excavación enorme para igualar la capacidad del Biodigestor Autolimpiable de Rotoplas.

Como vemos, el Biodigestor Autolimpiable de Rotoplas sustituye de manera eficiente el uso de fosas tradicionales de concreto, haciéndolo higiénico, económico, sin malos olores ni contaminación, con este biodigestor ayudas a la conservación de los mantos freáticos y cuidas el medio ambiente, además de reducir el riesgo de enfermedades gastrointestinales.