Una gotera es uno de los problemas en tubería más comunes, no solo por el constante ruido y el desperdicio de agua, sino también por los posibles daños que puede causar a nuestra propiedad: paredes con moho y humedad, grietas y hasta problemas en los cimientos de casas. La buena noticia es que para saber como arreglar un caño de agua que gotea requiere de un poco de conocimiento y las herramientas adecuadas.

Así que vamos a guiarte paso a paso para que aprendas cómo arreglar un caño de agua que gotea, con consejos prácticos y recomendaciones acerca de las mejores tuberías si necesitas reemplazar el sistema.

¿Por qué se producen las fugas?

Antes de empezar a reparar, es importante entender las causas más comunes de las fugas de agua, no sólo para prevenirlas sino para que te des una idea de lo que puede estar pasando en el sistema de plomería de tu hogar.

– Corrosión: El agua y ciertos minerales pueden corroer las tuberías, especialmente las de metal más antiguas. El agua del Perú es muy dura y ese depósito de minerales contribuye a la corrosión y con ella, roturas y goteos.

– Desgaste natural: Con el tiempo, los materiales se desgastan y pueden aparecer grietas. Si la instalación de plomería tiene más de 2 décadas, es importante considerar su reemplazo.

– Cambios de temperatura: Las fluctuaciones de temperatura pueden causar que las tuberías se expandan y contraigan, generando grietas.

– Mala instalación: Una instalación incorrecta desde el principio puede provocar fugas a largo plazo. Basta con una unión mal hecha o débil para tener un punto vulnerable que generará una fuga.

– Impactos: Golpes o movimientos bruscos pueden dañar las tuberías. Esto es muy común en tuberías expuestas.

Herramientas y materiales necesarios

• Llave inglesa
• Destornillador
• Cinta métrica
• Linterna
• Alicate
• Masilla epoxi o cinta de teflón
• Nuevas juntas o empaques (si es necesario)
• Abrazaderas (si es necesario)
• Recipiente para recoger el agua
• Guantes de goma
• Gafas de seguridad

Localiza la fuga

Seca el tubo sospechoso con un paño bien seco. Escucha atentamente. El sonido del goteo te ayudará a localizar la fuga. También revisa visualmente: Busca manchas de humedad, óxido, cambios de textura o grietas en las tuberías. En el suelo también puede haber humedad. Si hace falta, utiliza una linterna: En lugares oscuros, una linterna te permitirá ver mejor. Esto puede parecer obvio, pero a veces las gotas de agua se escurren por la tubería, haciéndonos pensar que la fuga está en otro punto.

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Tipos de fugas y cómo solucionarlas

Fugas en conexiones:

• Cierra la válvula de agua principal o la de paso. Esto siempre debe ser lo primero que hagas.
• Seca el área alrededor de la conexión. Revisa el punto en el que está la fuga.
• Afloja la tuerca y chequea su estado. Debes ver si está en buen estado, si está rota o erosionada y debe cambiarse. Si sólo está floja, puedes quitar el teflón viejo y aplicar una o dos capas, en sentido de las agujas del reloj sobre la rosca y apretar nuevamente, con firmeza pero sin pasarte.
• Si está rota, puedes reemplazarla. Esto dependerá del material y su ubicación, las de rosca son más sencillas de cambiar.
• En caso de que veas que por su ubicación o material no puedes cambiarla, puedes aplicar una solución temporal: aplicar masilla epoxi, deja secar. Esto te dará tiempo para llamar a un profesional.

Grietas en las tuberías:

• Una vez localices la grieta, cierra la llave de paso.
• Para grietas pequeñas, puedes utilizar masilla epoxi. Seca la sección del tubo bien, pasa una lija sobre la superficie para eliminar residuos y aplica la masilla preparada de forma prolija. Deja secar varias horas antes de volver a usar esa tubería.
• Para grietas grandes, es posible que debas reemplazar la sección dañada de la tubería. Si no tienes mucho conocimiento en plomería, es mejor llamar a un profesional.

Fugas en válvulas:

• Cierra la válvula principal, así evitas que siga goteando.
• Revisa la válvula. Comienza con el empaque y sigue con la junta. Una vez identificado el problema, reemplaza el empaque o la junta dañada.
• Vuelve a ajustar la válvula. No olvides un poco de teflón en las roscas y ajustar con firmeza pero sin exagerar, porque esto rompe el sello de la rosca.

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Consejos adicionales

– Seguridad primero: Antes de empezar cualquier reparación, asegúrate de cortar el suministro de agua.

– Trabaja con cuidado: Evita dañar otras tuberías o conexiones. Recuerda que un golpe puede fracturar una tubería vieja.

– Limpia el área de trabajo: Elimina cualquier residuo antes de aplicar la masilla o cinta. Limpia con un paño y si hace falta, degasta un poco la superficie con una lija pequeña para aumentar la adherencia de la masilla.

– Si no estás seguro, llama a un profesional: Las reparaciones de plomería pueden ser complicadas. Si no te sientes cómodo realizando la reparación, es mejor contratar a un plomero.

¿Cuándo considerar el reemplazo completo de las tuberías?

Si bien reparar una fuga puede ser una solución a corto plazo, en algunos casos es más recomendable reemplazar completamente el sistema de tuberías. Esto podría ser necesario si:

• Las tuberías son muy antiguas y están en mal estado general.
• Existen múltiples fugas en diferentes puntos del sistema.
• Se detectan signos de corrosión severa.
• Se desea mejorar la eficiencia del sistema de suministro de agua.

Evita fugas: cambia a tubería de termofusión

La tubería fusión Rotoplas se ha convertido en una opción cada vez más popular para reemplazar las antiguas tuberías en los hogares peruanos. Esto no es casual, pues la tubería fusión representa una gran mejora.

Mayor durabilidad: La termofusión ofrece una unión molecular entre las tuberías, lo que las hace extremadamente resistentes a la corrosión, a los cambios de temperatura y al desgaste por el paso del tiempo. Esto se traduce en una vida útil mucho más larga en comparación con las tuberías metálicas tradicionales.

Fácil instalación: La instalación de tuberías de termofusión es relativamente sencilla y rápida, lo que reduce los costos de mano de obra. Además, al ser livianas y flexibles, son más fáciles de manipular y adaptar a diferentes espacios.

Menor riesgo de fugas: Gracias a su sistema de unión por calor, las tuberías de termofusión ofrecen una junta monolítica, lo que reduce significativamente el riesgo de fugas y los daños asociados.

Resistencia a productos químicos: La termofusión es resistente a una amplia variedad de productos químicos que se encuentran comúnmente en el agua, lo que garantiza una mayor pureza y seguridad del suministro.

Aislamiento térmico: Estas tuberías ofrecen un excelente aislamiento térmico, lo que ayuda a mantener la temperatura del agua y reduce las pérdidas de calor.

Versatilidad: La tubería de termofusión se puede utilizar en una amplia variedad de aplicaciones, tanto para agua fría como para agua caliente.

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