Todo lo que tienes que saber de tanques industriales de almacenamiento

En el mundo industrial, la gestión efectiva de recursos es esencial para mantener operaciones fluidas y productivas. El almacenamiento adecuado de sustancias líquidas y productos químicos es una parte integral de este proceso. Los tanques de almacenamiento industrial son estructuras diseñadas específicamente para resguardar una variedad de líquidos, desde agua hasta productos químicos altamente corrosivos, garantizando su integridad y disponibilidad cuando sea necesario. Esto incluye los tanques para químicos hasta los tanques industriales para agua. Sigue leyendo y conoce los tipos de tanques y por qué los tanques industriales de polietileno de alta densidad (HDPE) han conquistado el mercado.

Tipos de tanques industriales

Tanques industriales para combustible

Capaces de almacenar una gran variedad de líquidos, estos tanques son empleados para almacenar líquidos inflamables, pues son capaces de almacenar vapores de forma segura. Hay tanques subterráneos, hechos especialmente para guardar combustible y otras sustancias peligrosas. También hay tanques superficiales, que requieren una inversión menor para su construcción y mantenimiento porque no es necesario hacer excavaciones extensas o tuberías elaboradas. Por esta razón pueden ser más populares.

Tanques para almacenar químicos

Estos tanques pueden almacenar sustancias como fertilizantes, propano, gas licuado, subproductos del petróleo o petróleo crudo. Su forma y tamaño depende de sus usos, pues pueden usarse para mezclar, procesar, almacenar o transportar estos químicos. Asimismo, es posible encontrarlos de materiales diversos como fibra de vidrio (popular por su resistencia a la corrosión) y acero inoxidable, que es un material fuerte, durable y confiable. Los tanques de polietileno de alta densidad, como los tanques Rotoplas, son los más empleados en esta época, pues se pueden reforzar, son duraderos, fuertes, resistentes a la corrosión, ligeros y más económicos.

Tanques industriales para almacenar agua

Diseñados especialmente para su aplicación industrial, estos tanques de almacenamiento de agua se encargarán de almacenar el preciado recurso, pero también pueden emplearse para almacenar otros líquidos como kerosene, gasolina, aceites, entre otros. Estos depósitos pueden usarse además para captación pluvial, almacenar agua para el riego o agua necesaria para la producción industrial. También pueden mantenerse como medida de seguridad para extinguir posibles incendios.

Tanques industriales para petróleo

Estos tanques son reservorios que almacenan el petróleo durante varios pasos de su procesamiento, ya sea para su refinación o para su uso. Estos tanques son especialmente diseñados para este propósito, pues deben seguir una serie de parámetros y estándares que garanticen su seguridad para el medio ambiente y las personas. Estos tanques suelen estar fabricados en acero inoxidable, concreto reforzado o plástico. Algunos de los tanques usado en esta industria son:

Tanques delimitados: rodeados por otro tanque o por diques, sirven para prevenir derrames, escapes u otro tipo de contaminación de las áreas circundantes.

Tanques de techo flotante: como su nombre lo indica, tienen un techo que se eleva o baja en respuesta a la cantidad de petróleo en el tanque. Esto tiene como objetivo prevenir la acumulación de vapor en el interior del tanque.

Tanques de paredes dobles o sencillas: estos tanques tienen una o más capas de plástico o de acero, lo que mejora la resistencia del tanque.

Tanques industriales de polietileno de alta densidad (HDPE)

Si bien en la actualidad todavía es posible encontrar tanques en materiales como el acero inoxidable y la fibra de vidrio, materiales plásticos como el polietileno HDPE acaparan más el mercado industrial. Esto ocurre porque este material ofrece muchos beneficios. No se trata sólo de su bajo costo, sino de su versatilidad, además de otras características como:

– Resistencia a la Corrosión: El tanque de HDPE es inherentemente resistente a la corrosión causada por productos químicos agresivos, ácidos y bases, lo que lo hace ideal para el almacenamiento de una amplia gama de sustancias químicas sin preocupaciones de deterioro o contaminación del contenido.

– Ligereza: Los tanques de HDPE son significativamente más ligeros que sus contrapartes de acero u otros materiales. Esto facilita su transporte, manipulación y instalación, reduciendo los costos laborales y logísticos.

– Durabilidad: Los tanques de HDPE son duraderos y resistentes a impactos y tensiones mecánicas. No se corroen ni se oxidan con el tiempo, lo que prolonga su vida útil y reduce la necesidad de mantenimiento, esto representa una gran ventaja dentro de la industria.

– Fácil de instalar: Por su peso ligero, los tanques de polietileno de alta densidad son fáciles de instalar y requieren menos equipo pesado. Esto agiliza el proceso de puesta en marcha y minimiza el tiempo de inactividad en la producción.

– Bajo Costo de Mantenimiento: los tanques de polietileno de alta densidad no requieren mantenimiento extenso o especializado, lo que reduce los costos de mantenimiento a lo largo de su vida útil.

– Baja Conductividad Eléctrica: El polietileno de alta densidad tiene una baja conductividad eléctrica, lo que lo convierte en una opción segura para el almacenamiento de productos químicos inflamables o explosivos.

Los tanques industriales de almacenamiento Rotoplas son ideales para el almacenamiento de agua, alimentos y + de 300 sustancias químicas. Puedes pedirlos estándar, reforzado o doble reforzados, dependiendo de su uso, previo asesoramiento técnico del staff de Rotoplas. No alteran el olor, sabor ni color de su contenido, además su instalación es sencilla. Los tanques industriales Rotoplas son el aliado perfecto para múltiples industrias como: Minería, Agrícola, Pesquera, Agropecuaria, Metalúrgia, Vitinícola, Cervecera, Industrial, entre otras. Su versatilidad, la relación calidad/precio y en especial la asesoría hacen que los tanques Agro-Industriales de Rotoplas marquen la diferencia.